La salud es lo primero. Seguro que has escuchado esta frase miles de veces, pero es que no podría ser más cierta. Gozar de una buena salud es esencial para poder disfrutar de una vida plena y satisfactoria. Para celebrar el Día Mundial de la Salud 2023, bajo el lema Salud Para Todos, hablamos sobre qué hábitos para la salud hay que adoptar para cuidar de ella y mejorar la calidad de vida en general.
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Índice de contenidos
¿Qué es la salud pública?
La salud pública es una disciplina que se ocupa de proteger y mejorar la salud de la población en general a través de la prevención y el control de lesiones y enfermedades. Mayoritariamente, se enfoca en promover hábitos y estilos de vida saludables y abordar las necesidades sanitarias de las comunidades en su conjunto, en lugar de centrarse únicamente en el tratamiento de las enfermedades individuales.
En el pasado, esta área se ocupaba únicamente de las enfermedades contagiosas. Sin embargo, en la salud pública intervienen una serie de factores sociales que hay que tener en cuenta. Por lo que, en la actualidad, los profesionales de la salud pública trabajan en colaboración con una amplia gama de sectores y disciplinas, incluyendo la medicina, la enfermería, la epidemiología, la estadística, la salud ambiental, la política de salud y la planificación urbana, entre otros. De este modo, se ocupa desde el control de enfermedades contagiosas y pandemias, hasta la mejora de la nutrición y la prevención del tabaquismo, el abuso perjudicial de sustancias, la obesidad y el sedentarismo, entre otros.
¿Qué representa el Día Mundial de la Salud 2023?
El 7 de abril de 1948, numerosos países de todo el mundo se unieron con un objetivo en común: promover la salud de la población y ayudar a los más vulnerables. De este modo nació la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Desde entonces, cada 7 de abril celebramos el Día Mundial de la Salud, una jornada para concienciar sobre la importancia de adquirir hábitos saludables y evitar aquellos que dañan nuestro bienestar. Además, este año también se conmemora el 75º aniversario de la OMS, una oportunidad para recordar los desafíos que presenta el futuro en materia de salud.
¿Cómo promover los hábitos para la salud desde un punto de vista profesional?
Para construir sociedades más saludables y promover la salud desde un punto de vista profesional, existen diversas formas de hacerlo, según la disciplina desempeñada:
- Educación. Mediante la educación, podemos proporcionar información sobre la importancia de adquirir hábitos saludables mediante charlas, talleres y materiales educativos muy diversos.
- Prevención. Este proceso es crucial para controlar los factores de riesgo que causan problemas de salud e identificar y evitar la aparición de enfermedades y trastornos. Asimismo, también contribuye a reducir el impacto y la carga económica y social de las enfermedades existentes.
- Detección temprana. Mediante las pruebas de detección temprana, podemos diagnosticar enfermedades como el cáncer, la diabetes y la hipertensión arterial. Asimismo, es muy importante promover la realización de chequeos médicos regulares.
- Tratamiento. Proporcionar un tratamiento y unos cuidados médicos adecuados y de calidad a los pacientes enfermos es primordial. Además, también se debe garantizar el acceso a los servicios de atención médica para toda la población.
- Investigación. Una de las prioridades de la salud pública es contribuir al avance de la investigación en el campo de la salud para identificar nuevas formas de prevención y tratamiento de enfermedades.
- Política. Mediante el activismo, se puede participar en el diseño y la promoción de políticas públicas que favorezcan la promoción de la salud y la prevención de enfermedades.
Hábitos para la salud
Hay una serie de hábitos para la salud que son imprescindibles para mejorar el bienestar general, y muchos de ellos pasan por el autocuidado. El autocuidado se refiere a una serie de acciones que una persona realiza (o evita) para mantener su bienestar físico, emocional y mental. Esto puede incluir hábitos diarios como hacer ejercicio, dormir lo suficiente, mantener una dieta saludable, beber suficiente agua, practicar la meditación o la relajación y cuidar de su higiene personal. Además, contempla el hecho de pasar tiempo con uno mismo, establecer límites y decir “no” a actividades perjudiciales o que nos resulten estresantes.
La Organización Mundial de la Salud recomienda las siguientes prácticas de autocuidado:
- Seguir una alimentación saludable y equilibrada.
- Evitar el consumo de bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados y ricos en grasas saturadas y azúcares.
- No consumir tabaco, drogas, ni otro tipo de sustancias tóxicas.
- Evitar o reducir el consumo de bebidas alcohólicas.
- Practicar deporte cada día y mantenerse físicamente activo.
- Dormir lo suficiente, entre 7 y 9 horas al día.
- Acudir al médico con regularidad y seguir una pauta de vacunación adecuada.
- Cuidar de la seguridad en carretera. No conducir a una velocidad excesiva ni bajo los efectos del alcohol, abrocharse el cinturón de seguridad, evitar distracciones al volante, no usar el teléfono móvil, etcétera.
- Mantener una buena higiene personal.
- Hacer vida social y construir relaciones saludables.
- Cuidar de la salud sexual y mantener prácticas seguras.
Promover hábitos saludables es el primer paso para cuidar de la salud pública y mejorar el bienestar físico y mental de las personas. Es importante recordar que la promoción de dichos hábitos no solo depende de las elecciones individuales, sino también de los organismos públicos y de las instituciones sanitarias. Por lo tanto, es necesario fomentar políticas y entornos que faciliten la adopción de los mismos. Estas podrían ser la implementación de programas de alimentación saludable en escuelas y lugares de trabajo, la construcción de infraestructuras para la actividad física y la promoción de la salud mental en el ámbito laboral. La promoción de la salud pública no solo es una responsabilidad individual, sino también una responsabilidad colectiva.