Para que la lactancia materna sea una experiencia agradable, es importante dominar ciertas técnicas de la lactancia materna que ayuden a mejorar tanto el agarre como las posiciones del amamantamiento. Además, el correcto almacenamiento de la leche materna es esencial para garantizar que el bebé reciba los nutrientes adecuados en todo momento. En este artículo, te hablaremos de las mejores posiciones para amamantar, las técnicas de agarre y cómo extraer y almacenar la leche materna correctamente.
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Índice de contenidos
Técnicas de la lactancia materna
Uno de los aspectos clave de la lactancia materna es el agarre adecuado. Un buen agarre no solo facilita que el bebé se alimente correctamente, sino que también previene problemas como grietas en los pezones o dolor innecesario. El agarre debe ser completo, es decir, el bebé debe cubrir con su boca toda la areola, no solo el pezón.
Para lograr esto, es importante que el bebé tenga la boca abierta antes de acercarse al pecho. Una buena técnica de agarre implica que el bebé se acerque al seno con la boca abierta, de modo que tome la mayor cantidad posible de areola dentro de su boca, no solo el pezón. Esto asegura que el bebé pueda succionar de forma eficiente y cómoda.
Posiciones para amamantar
Las posiciones para amamantar son fundamentales para asegurar que tanto la madre como el bebé estén cómodos durante la lactancia. Existen varias posturas que puedes probar hasta encontrar la que funcione mejor para ti y tu bebé. Algunas de las más comunes son:
Posición de cuna: En esta postura, sostienes al bebé con el brazo que está del lado del pecho que está ofreciendo. La cabeza del bebé debe estar alineada con su cuerpo y la boca debe estar frente al pezón. Esta es la posición más común y puede ser adecuada para muchas mamás y bebés.
Posición de fútbol o balón de rugby: El bebé se coloca bajo el brazo de la madre, con sus pies hacia atrás, mientras su cuerpo está sostenido por el brazo. Esta posición es ideal para mamás que han tenido una cesárea, ya que evita que el bebé presione sobre la herida. También es útil si tienes mellizos o gemelos.
Posición acostada: En esta postura, tanto la madre como el bebé se recuestan de lado. El bebé se coloca frente al pecho y se le permite succionar mientras ambos descansan. Es una excelente opción durante la noche o cuando se quiere amamantar de forma relajada.
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Extracción y almacenamiento de la leche materna
La extracción de la leche materna es una técnica que puede resultar útil cuando no puedas amamantar directamente a tu bebé o si necesitas almacenar leche para futuras tomas. Para hacerlo, puedes utilizar un sacaleches manual o eléctrico. Es importante extraer la leche en un ambiente limpio y mantener una buena higiene para evitar la contaminación de la leche.
Una vez extraída la leche, es fundamental almacenarla correctamente. La leche materna debe guardarse en envases adecuados y nunca en bolsas de plástico comunes, ya que no son aptas para conservarla adecuadamente. Además, la leche materna se puede almacenar en el refrigerador por un máximo de 4 días y en el congelador hasta por 6 meses.
Es importante recordar que la leche materna debe ser descongelada en el refrigerador o con agua tibia antes de ofrecérsela al bebé. Nunca debes calentarla en el microondas, ya que esto puede alterar las propiedades nutricionales de la leche y también puede generar puntos calientes que pueden quemar la boca del bebé.
Tiempo de almacenamiento de la leche materna
El tiempo de almacenamiento de la leche materna depende de las condiciones de conservación. Como mencionamos antes, la leche puede mantenerse en el refrigerador hasta 4 días y en el congelador hasta 6 meses. Si no estás segura de cuándo la leche se almacenó, es importante que utilices un sistema de rotulación en cada envase para marcar la fecha y la hora de extracción.
Cuando necesites descongelar la leche, asegúrate de hacerlo en el refrigerador durante la noche o mediante el uso de agua tibia. Una vez descongelada, la leche no debe volverse a congelar ni almacenarse por más de 24 horas.
Dominar las técnicas de la lactancia materna es esencial para garantizar una experiencia exitosa para ti y tu bebé. Practicar las mejores posiciones para amamantar y asegurarte de que el agarre sea el adecuado contribuirá a una lactancia cómoda y eficaz. Además, si necesitas extraer y almacenar leche materna, es fundamental conocer los tiempos de almacenamiento y cómo hacerlo correctamente para preservar todas sus propiedades. Con estas recomendaciones, podrás disfrutar de la lactancia de una manera más tranquila y segura.
